ESTIMADO PADRE RAYMUNDO:
Escribo para felicitar a los misioneros Maryknoll por su trabajo compasivo con los más pobres del mundo. Pertenezco a la Fundación Benéfica Posada del Ángel en Puerto Rico. Nuestra fundación lleva 43 años dando servicio a personas sin hogar, ancianos y personas de bajos o ningún recurso económico. Me gustaría decirles que los misioneros son una inspiración para continuar nuestro trabajo de servicio a los menos afortunados en nuestra isla. Les pido que nos tengan en sus oraciones para continuar con la obra que Dios nos ha encomendado.
Nerushka Díaz | Guaynabo, PR
ESTIMADO PADRE RAYMUNDO:
Cada vez que veo imágenes de niños o bebés en sus publicaciones de Facebook, me recuerdan el nacimiento del niño Jesús. Él es la transfiguración del mundo, la bondad, el amor, la Paz, la alegría, la fe, la esperanza, la amistad y el perdón. Creo que cuando pensemos en el otro como si fuera el niño Jesús tendremos un mundo más aceptable.
Herminia Rojas | Vía Facebook
ESTIMADO PADRE RAYMUNDO:
Los Padres y Hermanos Maryknoll son los hijos de Nuestro Salvador que nos dan un buen ejemplo. Ellos dan su vida como testimonio y su entrega a la defensa de los privilegiados de Dios, que son los más pobres. Recemos unidos para que muchos jóvenes sientan el llamado al servicio de los que nos necesitan.
Alejandro Barris | Vía Facebook
ESTIMADO PADRE RAYMUNDO:
Cada vez que leo los artículos que publican en la revista Misioneros fortalece mi fe enormemente. Le pido a Dios de corazón que bendiga a todos los misioneros Maryknoll que hacen una diferencia en este planeta. Sobre todo gracias infinitas a todos los misioneros Maryknoll que sirvieron en Perú por muchos años y algunos que aún siguen sirviendo en diferentes misiones. Ellos nos enseñaron el espíritu de la misión y plantaron una semilla de compasión en nuestros corazones.
María Farfán | Vía Facebook
ESTIMADO PADRE RAYMUNDO:
Después de haber pasado más de un año de confinamiento y cuidado extensivo, felizmente ya estamos vacunados. Ahora recuerdo los tiempos en los que el miedo invadía nuestras mentes. Y a pesar que aún tenemos que seguir cuidándonos, pienso en mis hermanos del mundo entero. Pedimos a los países ricos que se comprometan a compartir las vacunas. Y espero que esta pandemia nos deje una lección de valorar los pequeños detalles que pasamos por alto en nuestra vida cotidiana.
Andrea Espinoza | Los Ángeles, NY
Imagen destacada: Réplica de la Gruta de Nuestra Señora de Lourdes, quien sostiene un rosario, en los jardines del Vaticano. En octubre se celebra el mes del Santo Rosario. (CNS/Vatican Media)