Jesús les respondió: “Vayan a contar a Juan lo que están viendo y oyendo: los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos quedan limpios de la lepra, los sordos oyen, los muertos resucitan y a los pobres se les anuncia el Evangelio. Dichoso aquel que no se sienta defraudado por mí”.
MATEO 11: 4-5
Por Dan Moriarty
Adviento nos ofrece una oportunidad especial para crecer en nuestra relación con Dios y profundizar nuestro compromiso con el estilo de vida de Jesús, arraigado en la no violencia.
La Guía de Reflexión de Adviento 2022: Vivir la no violencia del Evangelio de la Oficina de Asuntos Globales Maryknoll contiene reflexiones, preguntas, oraciones y acciones basadas en la lectura del Evangelio de cada semana y la experiencia de los misioneros de Maryknoll que han vivido y trabajado con comunidades marginadas afectadas por la injusticia y conflictos violentos en África, Asia y América Latina.
Aquí, compartimos las reflexiones semanales sobre la lectura del Evangelio de cada domingo.
Domingo, 11 de diciembre de 2022
Is 35, 1-6a. 10, Sant 5, 7-10, Mt 11, 2-11
Al encender nuestras velas de Adviento, hemos hecho un balance de la oscuridad y la violencia persistente en nuestro mundo. Hemos contemplado nuestra propia participación en esa violencia, y nos hemos arrepentido. Ahora, en este domingo de Adviento, encendemos una vela rosa, y nos alegramos, porque la encarnación está cerca.
Cuando el encarcelado Juan Bautista envía a sus seguidores a preguntar si Jesús es “el que ha de venir”, Jesús respondió señalando los signos que ha realizado. “Vayan a contar a Juan lo que están viendo y oyendo”. Los ciegos ven, los cojos andan, se anuncia la buena noticia a los pobres. Al reflexionar en este Adviento sobre la no violencia evangélica, ¿cuáles son los signos del Jesús no violento que actúa en el mundo de hoy?
Hacemos bien en fijarnos primero en el ejemplo de las mujeres. Años antes de los acontecimientos de la lectura de hoy, María, embarazada de Jesús, se encuentra con Isabel, embarazada de Juan, y expresa en el Magnificat el significado de la encarnación para conseguir una paz justa: al convertirse en su humilde hijo, Dios “ha derribado a los poderosos de sus tronos y ha levantado a los humildes; ha colmado de bienes a los hambrientos y ha despedido a los ricos con las manos vacías”.
También hoy, las mujeres son a menudo un modelo de no violencia como camino hacia una paz justa. La Iniciativa Católica por la no violencia de Pax Christi Internacional ha documentado sorprendentes ejemplos de no violencia efectiva y activa por parte de mujeres líderes:
En Filipinas, la activista por la paz Myla Leguro desarrolló un método de diálogo para preparar a las personas y a las comunidades para las negociaciones con el fin de resolver las disputas por la tierra. Su proceso crea habilidades, confianza y acuerdos que sirven de base para abordar conflictos más amplios. Ha sido adoptado en zonas de conflicto de todo el mundo, incluida África Central, donde otros líderes han desarrollado su modelo.
En el norte de Kenya, la constructora de la paz de Pax Christi, Elizabeth Kanini Kimau, facilitó el diálogo entre comunidades de pastores enfrentadas. Entendiendo el respeto que se le tiene a los ancianos, invitó a los ancianos de todas las partes a dialogar en un lugar seguro y neutral. Los ancianos reclutaron a los guerreros para que siguieran su ejemplo, quienes a su vez invitaron a los jóvenes. Desde entonces, los ancianos han establecido un diálogo continuo para resolver los conflictos antes de que estallen en violencia.
En los campos de refugiados sirios del Líbano, Sara Ionovitz, de Operazione Colomba, abrió espacios para el diálogo desde las bases hasta los actores estatales de alto nivel a través de la “diplomacia democrática popular”, lo que permitió a los refugiados aportar por primera vez planes de paz a las negociaciones. La presencia de su equipo también tendió puentes de diálogo entre los sirios y la población libanesa de acogida.
Hagamos una pausa esta semana para fijarnos en los profetas de la no violencia en nuestro mundo, para reconocer el liderazgo de las mujeres, y ver los signos de Dios con nosotros, donde la no violencia ha conducido a la paz con justicia.
Imagen destacada: Una niña cargando a un niño en su espalda en un contexto de pobreza. Durante el Adviento, los cristianos se preparan para recibir en sus corazones al Niño Jesús, que también nació en la pobreza.. (foto de Bill Wegener/Unsplash)
