MONTEVIDEO, Uruguay (CNS) — Uruguay, el país más secular de América del Sur, está a punto de tener su primer santo.
El obispo Jacinto Vera, el primer obispo de Montevideo, fue declarado venerable en 2015 y el 17 de diciembre el Vaticano anunció que sería beatificado, después de que el papa Francisco firmara formalmente un milagro atribuido al futuro santo.
El camino a la santidad del obispo Vera no solo refleja la historia del país, sino también el nuevo camino para la iglesia en Argentina, Paraguay y Uruguay bajo la dirección del papa Francisco, un argentino.
“La imagen de un santo como Jacinto Vera, alguien con un significado tan importante para nuestro país y nuestra historia, es de gran beneficio para los católicos. Él caminó por nuestro país. No hay un lugar al que vayas donde él no haya estado”, dijo el padre Gabriel González, profesor de la Universidad Católica de Uruguay que ha escrito extensamente sobre la vida y obra de Monseñor Vera.
Jacinto Vera nació durante un viaje marítimo en 1813 de sus padres quienes salieron de las Islas Canarias de España con el objetivo de llegar a tierras de cultivo en Uruguay, que todavía era una colonia española. Se inclinó por la iglesia temprano en su vida y estudió con los jesuitas en la vecina nación de Argentina hasta su ordenación en 1841 como sacerdote diocesano.
Como obispo de Montevideo, invitó a los jesuitas a regresar a Uruguay y trajo varias congregaciones de religiosas para restablecer el orden en una iglesia en la periferia del continente. González dijo que la iglesia local estaba en desorden, pero eso cambió con el obispo Vera. Pasó la mayor parte de su tiempo viajando por el país, realizando tres “misiones” como obispo. Murió en 1881 durante su último viaje al interior. Los viajes son la razón por la que se le conoce localmente como el santo gaucho, o vaquero, porque viajaba a caballo.
El camino a la santidad del obispo Vera fue interrumpido varias veces. Archivos de su causa se perdieron en el Vaticano y se encontraron nuevamente en la década de 1990, cuando Mons. Alberto Sanguinetti asumió como postulador diocesano. El trabajo concluyó en 2012 con un documento de 1,500 páginas; El obispo Vera fue considerado venerable tres años después. Varios milagros han sido acreditados a su intercesión. Uno fue un paciente que se recuperó inexplicablemente de una ruptura de hígado en 2013. Su familia rezó por la intercesión del obispo Vera.
La misa de beatificación, que podría ocurrir en mayo, coincidiendo con su muerte hace 142 años, llegará al país que podría ver varios santos más en los próximos años, a pesar de que es completamente laico desde hace más de 105 años y tiene el porcentaje más bajo de católicos profesos en la región.
Mientras que el obispo Vera será el primer santo uruguayo, Santa María Francesca Rubatto, canonizada en 2022, tiene fuertes conexiones uruguayas. Nació en Italia y pasó poco tiempo en Uruguay, pero murió en el país en 1904. Allí ocurrió el milagro atribuido a su intercesión. Es la fundadora de las Hermanas Capuchinas de Madre Rubatto, el nombre de la orden desde 1973.
Después del obispo Vera hay otros tres candidatos a la canonización, incluido el padre salesiano Rubén Isidro Alonso, conocido como el padre Cacho. Fue declarado “siervo de Dios” en 2017. Las causas de dos laicos están en proceso de investigación.
Los santos potenciales en Uruguay son parte de una lista en expansión en esta parte del mundo desde el inicio del papado del papa Francisco. La lista incluye a la hermana paraguaya María Felicia de Jesús Sacramentado, conocida como hermana Chiquitunga, quien fue beatificada en junio de 2018, y un número cada vez mayor de argentinos. El papa Francisco ha beatificado a 10 argentinos y canonizado a uno.
El papa también está rehaciendo la jerarquía del Cono Sur. El arzobispo de Montevideo Daniel Sturla fue creado cardenal en 2015, solo el segundo cardenal en la historia del país, y en agosto, el arzobispo Adalberto Martínez Flores de Asunción, Paraguay, se convirtió en el primer cardenal de ese país.
“El papa Francisco ha fortalecido la jerarquía con nuevos cardenales y ha enriquecido la iglesia con nuevos modelos de santidad” con nuevos santos, dijo González.
Imagen destacada: El Obispo Jacinto Vera de Montevideo, Uruguay, que vivió en el siglo XIX, será beatificado, anunció el papa Francisco en una serie de decretos para causas de santidad publicados el 17 de diciembre de 2022. (Foto CNS/Arquidiócesis de Montevideo)
