Por Nicolás de Cárdenas, ACI Prensa
La Sala de Prensa de la Santa Sede ha hecho público este jueves el lema de la Jornada Mundial del Emigrante y el Refugiado 2024, “Dios Camina con su pueblo”, señalando que los migrantes son “el icono contemporáneo de la Iglesia en salida”.
La 110ª Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado se celebrará el próximo 29 de septiembre de 2024, con un mensaje que “se centrará en la dimensión itinerante de la Iglesia con una mirada particular a los hermanos y hermanas migrantes, icono contemporáneo de la Iglesia en salida”, ha destacado la Sala de Prensa vaticana en su boletín oficial.
En el texto distribuido por la Santa Sede, se explica que “se trata de un viaje que hay que hacer sinodalmente para alcanzar juntos, superando todos los obstáculos y amenazas, la verdadera patria”.
Así, refuerza el texto, “en el camino, dondequiera que estéis, es esencial reconocer la presencia de Dios que camina con su pueblo, asegurándole guía y protección a cada paso; pero es igualmente esencial reconocer la presencia del Señor, Emmanuel, Dios-con-nosotros, en cada emigrante que llama a la puerta de nuestro corazón y se ofrece al encuentro”.
El Papa Francisco y los migrantes
La preocupación por los migrantes y refugiados ha sido una constante en el pontificado del Papa Francisco, lo que se ha reflejado en algunos gestos de relevancia pastoral.
Así, el 8 de julio de 2013 el Papa Francisco realizó su primer viaje como pontífice a la isla de Lampedusa donde expresó que “la muerte de inocentes, principalmente niños, en busca de una existencia más serena, lejos de las guerras y de la violencia, es un grito doloroso y ensordecedor que no puede dejarnos indiferentes”.
Ya en junio de 2020, el Pontífice añadió tres invocaciones marianas en las letanías que se recitan tras el rezo del Santo Rosario, entre las que se encontraba la invocación “Consuelo de los migrantes”.
Más recientemente, en septiembre de 2023, el Santo Padre realizó un viaje apostólico a la ciudad francesa de Marsella para participar en el evento Encuentros del Mediterráneo donde también participó en un encuentro interreligioso.
En esa ocasión denunció: “No podemos resignarnos a ver seres humanos tratados como mercancía de cambio, aprisionados y torturados de manera atroz; no podemos seguir presenciando los dramas de los naufragios, provocados por contrabandos repugnantes y por el fanatismo de la indiferencia”.
El pasado mes de octubre, durante la celebración de la primera asamblea del Sínodo de la Sinodalidad, el Papa presidió un acto litúrgico y un momento de oración en la plaza de San Pedro en favor de las personas que salen de sus países.
“Como el buen samaritano, estamos llamados a hacernos prójimos de todos los viandantes de hoy, para salvar sus vidas, curar sus heridas, aliviar su dolor. Los migrantes tienen que ser acogidos, protegidos, promovidos e integrados. Se trata de una responsabilidad a largo plazo”, instó.
Imagen destacada: El Papa Francisco bendice a Mbengue Nyimbilo Crepin, un migrante de Camerún cuya esposa e hija murieron en julio cruzando el desierto del norte de África, durante una reunión en la Domus Sanctae Marthae del Vaticano el 17 de noviembre del 2023. (CNS/Medios Vaticanos)
