L a Conferencia de Obispos de América Latina y el Caribe lanzó una exhortación pastoral sobre el cuidado de la creación en respuesta a las consecuencias perjudiciales de la sobreexplotación de los recursos naturales: violaciones de los derechos humanos, conflictos, desplazamientos, contaminación y muerte. Expresan especial preocupación por la Amazonía y sus pueblos indígenas. La biodiversidad única de este ecosistema contribuye a purificar el aire que respiramos, pero se destruye a una velocidad rápida. Esta atención a la destrucción de la Amazonía y al reconocimiento de sus comunidades indígenas como defensores de nuestra casa común nos lleva al Sínodo sobre la Amazonía que tendrá lugar en el Vaticano en octubre. El Sínodo plantea la necesidad de avanzar hacia una ecología integral para salvar el Amazonas y, por extensión, el planeta mismo, en el corazón de la misión universal de la Iglesia.
La Oficina de Asuntos Globales de Maryknoll expresa la posición de Maryknoll en debates sobre políticas públicas en Naciones Unidas, el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional y ante el gobierno de Estados Unidos y otros países, con el propósito de ofrecer educación en temas de paz y justicia social, la integridad de la creación y abogar por la justicia social, económica y del medio ambiente.
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