E l título de arriba lo dice todo: De la misión, para la misión.
Como ven en nuestra portada, estamos hablando del sacerdote más nuevo de Maryknoll. El llamado del Padre John Siyumbu al sacerdocio se encendió con las historias que escuchó al crecer en Kenya sobre los primeros misioneros en África Oriental. Como estudiante universitario, se inspiró en el trabajo de los misioneros Maryknoll que conoció. Ahora, proveniente de un país misionero donde Maryknoll sirve, el recién ordenado sacerdote irá a servir en misión a Perú.
La ordenación del padre Siyumbu abre un nuevo capítulo para los Padres y Hermanos Maryknoll: El fruto de una decisión tomada hace ocho años de aceptar seminaristas de lugares misioneros. Previamente, Maryknoll sostuvo que solo debía construir la Iglesia local en el exterior, no “tomar” vocaciones que se necesitan allí. Los tiempos cambian.
Hoy, a diferencia de 1918 cuando los primeros sacerdotes Maryknoll navegaron hacia China, la misión ya no es solo la Evangelización desde los continentes más ricos de Europa y América del Norte hacia el mundo en desarrollo. Ahora es global y multidireccional. Es ir al extranjero y es también recibir misioneros del extranjero y es ministrar en nuestras ciudades natales, nuestros propios vecindarios.
Al dar la bienvenida al Padre Siyumbu a la familia Maryknoll, los Padres y Hermanos se unen a las Hermanas Maryknoll en aceptar vocaciones de lugares misioneros. Sin embargo, quienes están familiarizados con la revista, saben que durante mucho tiempo Maryknoll ha mostrado el rostro cambiante de la misión y la diversidad que hace de este país un crisol de culturas globales y un reflejo del cuerpo único en Cristo.
—Lynn F. Monahan, Director Editorial Ejecutivo