Afiliada Maryknoll expande a Tanzania un proyecto que ayuda a niños vulnerables
Como secuela de la parálisis cerebral, Gabriela, de 8 años, solo podía desplazarse arrastrándose por el suelo. Después de ejercitar con un fisioterapeuta por un par de meses, Gabriela se levantó y caminó por primera vez en su vida. ¡Su sonrisa al moverse de forma independiente es tan hermosa!
Gabriela recibe atención en el Centro St. Justin en Musoma, Tanzania, que recientemente se asoció con nuestra organización sin fines de lucro Bridges to Healing International (Puentes de Sanación Internacional). Proveemos subvenciones para la atención médica de niños enfermos y discapacitados que son huérfanos o están en alto riesgo de abandono.
Bridges to Healing, que inició en Bolivia, comenzó a operar en Tanzania en 2023. Maryknoll tiene una larga historia de trabajo en este país de África oriental, tanto con niños vulnerables como en el cuidado de la salud. La Hermana Maryknoll Janet Srebalus, que ha pasado décadas en Tanzania, me presentó a los colaboradores para nuestros nuevos proyectos.
Trabajamos con las Hermanas del Inmaculado Corazón de África, una orden de religiosas tanzanas establecida por el Padre Maryknoll Gerald Grondin y solidificada a través de los esfuerzos de las Hermanas Maryknoll. Varios misioneros laicos de Maryknoll han servido con las Hermanas a lo largo de los años. Como afiliada Maryknoll, me uní a este rico legado.
Un niño con anemia falciforme recibe terapia física en el Centro St. Justin. La organización Bridges to Healing costea los gastos del servicio del terapista físico en el centro. (Cortesía de Erin Rickwa/Tanzania)
En Musoma, una ciudad en la orilla oriental del lago Victoria, las Hermanas del Inmaculado Corazón de África dirigen el Centro St. Justin para 115 niños discapacitados. Incluso con recursos muy limitados, las Hermanas han creado un entorno cálido y cariñoso. También dirigen Jipe Moyo, un refugio para niñas que huyen de la violencia sexual y la mutilación genital femenina. En ambos lugares, Bridges to Healing otorga fondos para una enfermera. Nuestro fisioterapeuta también va a zonas rurales a enseñar ejercicios de entrenamiento a familias con niños discapacitados.
En el extremo sur del lago Victoria, en Mwanza, la segunda ciudad más grande de Tanzania, trabajamos con un proyecto llamado Chanua Group. Muchos de los 60 niños a los que el proyecto brinda ayuda quedaron huérfanos a causa del VIH/SIDA. Hasta hace poco, el grupo, cuyo nombre significa “florecer” en suajili, estaba dirigido por la Hermana Maryknoll Felista Wanzagi. Dos afiliadas locales de Maryknoll en Tanzania lideran ahora el proyecto. Una de ellas, Costansia Mbogoma, es miembro de la Junta de Afiliados Maryknoll.
La idea de Bridges to Healing comenzó en 1995 mientras yo servía como misionera laica salesiana en un orfanato administrado por el gobierno para 100 niños en Santa Cruz, Bolivia. Los niños recibían poca o ninguna atención médica. Algunos estaban tan traumatizados que no hablaban, y los bebés se mecían a sí mismos para consolarse.
Erin Rickwa (izq.) habla con la Hermana Maryknoll Janet Srebalus y con la Hermana Margaret John Masalu. (Cortesía de Erin Rickwa/Tanzania)
Al regresar de Bolivia, estudié una maestría en Trabajo Social y diseñé un programa para brindar atención médica efectiva a niños como estos en entornos institucionales. Quería crear un “puente” hacia los recursos médicos locales.
Conocí a mi esposo, Spencer, mientras trabajaba como voluntaria en Bolivia, y nos casamos en 1998. Como médico, Spencer aporta su experiencia médica a nuestro trabajo. Juntos nos unimos al capítulo de Afiliados Maryknoll en San Diego, California, en 2001. A través del capítulo, conocí a la Hermana Maryknoll Ramona Oppenheim, quien se convirtió en una amiga e inspiración. Bridges to Healing International se constituyó en 2010. Los miembros de la actual junta directiva de Bridges to Healing International son todos afiliados Maryknoll.
Me atrajo la idea de Maryknoll de salir a observar y dedicar tiempo a escuchar las necesidades de la gente. Eso impulsa el servicio. Respetamos las normas culturales y nos centramos en el derecho universal de todos los niños a la atención médica básica.
Hay una herida profunda en los niños cuando no les es posible estar con sus padres biológicos. Nos asociamos solo con grupos que hacen todo lo posible para reunir a los niños de manera segura con miembros de la familia.
Erin Rickwa posa con la Hermana Regina Linda John. (Cortesía de Erin Rickwa/Tanzania)
Bridges to Healing ofrece tres tipos principales de asistencia. En primer lugar, ayudamos a que orfanatos, escuelas residenciales y refugios contraten enfermeras locales a tiempo completo. En segundo lugar, pagamos los exámenes médicos para todos los niños, así como los medicamentos y tratamientos. En tercer lugar, proporcionamos fondos para niños que necesitan cirugías, terapias, estudios de imágenes u otros tratamientos.
Edificar relaciones ha sido de vital importancia en la creación de Bridges to Healing. He sido muy afortunada de trabajar con bolivianos y tanzanos expertos que me ayudaron a navegar algunas situaciones difíciles. Me asombran los trabajadores de la salud en el sur global que hacen un trabajo increíblemente valiente, a menudo con poca o ninguna paga.
Al asociarme con hogares administrados por religiosos, trabajo con las hermanas para encontrar apoyo local. Les ayudo con los informes de las subvenciones y la recopilación de datos sobre las enfermedades que sufren los niños. Esto ayuda a crear modelos de atención apropiados y demuestra a la comunidad y a sus gobiernos las necesidades de estas poblaciones.
Bridges to Healing se enfoca en la vida diaria de los niños. ¿Pueden ir a la escuela? ¿Tienen problemas para dormir debido a pesadillas, dolores de cabeza, dolores de estómago o porque padecen sarna? Si tienen familia, ¿hay una manera segura para que regresen a casa?
¡Es importante no perder la esperanza! He sido testigo de muchos cambios positivos y concretos a lo largo de los 30 años que llevo haciendo este trabajo. Sí, hay mucho más por hacer y hay más niños a los que llegar, pero el progreso es posible.
Erin Rickwa es directora ejecutiva de Bridges to Healing International.